En 1979, la prensa informaba del triunfo electoral de la candidata conservadora Margaret Thatcher en Reino Unido, así como de un “misterioso” ataque a tiros que en Argel había sufrido el exiliado dirigente de ETA Txomin Iturbe Abasolo. Se daba cuenta también de ciertas tensiones diplomáticas con Marruecos, y se daba como probable una ley que fijara retribuciones estables y transparentes para quienes ostentaran el cargo de concejal en los ayuntamientos. Se pretendía así terminar con los habituales pagos “bajo manga”, oscuros, muy poco edificantes, y bastante habituales al parecer...
La foto que aquel año obtuvo Eusebio Mina atestigua que la zona del inicio de la calle de Yanguas y Miranda, junto al paseo de Sarasate, se encontraba entonces en pleno periodo de transformación. Desaparecía una generación de edificios de aire cuartelero, y proliferaban edificios de viviendas que ganaban en altura y en prestancia.
Hoy en día, la misma zona fotografiada en 1979 permanece perfectamente reconocible, aunque los cambios operados en los últimos 45 años son evidentes. Vemos asomar por la izquierda el edificio del Parlamento de Navarra (antigua Audiencia Provincial), y por la derecha cierra el mismo edificio de viviendas que veíamos en el año 1979. Eso sí, en el lugar del edificio derribado vemos hoy un bloque de ladrillo rojo, que combina sus líneas geométricas con una sobria pero cuidada y elegante decoración. Cerrando al fondo, alcanzamos a distinguir algunas viviendas del paseo de Sarasate.
En cuanto a las percepciones de concejales y alcaldes, son hoy públicas y transparentes, y en mis 8 años en el Ayuntamiento no he sido testigo de ni un solo pago “bajo manga”. Todos hemos oído hablar de ellos en otros lugares, pero en Pamplona ni los he visto, ni los he recibido, ni nunca nadie me los ha ofrecido. ¡Y que ni se les ocurra hacerlo...!
